Menuda decepción nos hemos llevado con la última temporada de PRISON BREAK! Es verdad que la serie siempre ha sido un poco "antoñita la fantástica" (cosa que no nos ha molestado en absoluto) pero el que TODA la puñetera temporada (22 larguíiisimos capítulos) gire entorno a un jodido artilugio de exótico nombre y funcionamiento cuestionable (Scylla) es sufrimiento suficiente como para perder interés por completo, una tortura paralelamente proporcional a los kilos que ganaba su protagonista Wentworth Miller en cada episodio.
Los personajes terminan por rayar lo absurdo (esos lazos familiares sorpresa!) y te importa tres cojones las múltiples desgracias que tienen que endurar. Se nos ha hecho totalmente cuesta arriba llegar al final de la serie (cuyas anteriores temporadas nos habían encantado!) y cuando crees que ya todo ha pasado te das cuenta que aún te queda por ver la mini-serie PRISON BREAK: EVASIÓN FINAL, cuyo planteamiento curiosamente me gustó bastante más que cualquier capítulo de la temporada, los tiros tendrían que haber ido por ahí.
En fin, una despedida bochornosa y muy poco digna de una serie que en su día fue toda una revelación. Una pena!
3 comentarios :
Yo desde la Tercera ya me olia lo peor. La cuarta me gusta hasta el momento en que entran a desactivar Scylla. Después es cuesta abajo y sin frenos...una pena...tengo todas las temporadas y ya no se si comprarme la cuarta por decorar. La miniserie no la he visto.
yo no queria deciros nada, pero fue una KK, como la primera y segunda temporada NADA...
fijate que de esta no me dio ninguna pena que terminara
Pues la miniserie no está del todo mal, aunque no es continuación de la serie propiamente dicha...narra lo sucedido desde que...hasta que...
Ya me entendéis no? ;-)
Pobre Prison Break...mira que terminar así de cutre...con lo que llegó a ser en su momento!
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