Está clarinete que el pequeñín BRUNO MARS está en racha y que no piensa desaprovechar ni un segundo de su recién adquirido estatus de mega estrella internacional. Tras petarlo en medio mundo con su Uptown Funk y comerse la Superbowl con ayuda de Beyoncé y Coldplay, ahora regresa con su tercer álbum llamado 24K MAGIC, que consta tan sólo de 9 temas y del que no existe edición Deluxe ni nada que se le parezca (por ahora). Un "menos es más" que juega a su favor como ya lo hiciera en su momento el gran clásico que es The Fame Monster de Gaga (al que no le hace sombra ni de lejos, claro...era sólo un ejemplo.)
Nos hace entrega de un disco que parece sacado directamente de los años 90. Aquí no vas a encontrar temas electrónicos ni dance, sino más bien a un Bruno Mars que canaliza al mítico James Brown con un cierto toque del My Prerogative de Bobby Brown (PERM), la secuela de su mayor éxito Uptown Funk (24K MAGIC), R&B sensual de la escuela de Babyface (VERSACE ON THE FLOOR), una producción que te va a recordar a TLC (CALLING ALL MY LOVELIES) y hasta un momento balada noventera whitneyhoustiniana (TOO GOOD TO SAY GOODBYE) cuyo estribillo me lleva siempre al famoso Ain't That Just The Way de la one hit only Lutricia McNeal.
En fin, un disquito pequeñito como su artista, pero muy resultón.
Lo Mejor: CHUNKY, THAT'S WHAT I LIKE, STRAIGHT UP & DOWN, CALLING ALL MY LOVELIES.
Lo Peor: Que su primer single 24K MAGIC sea casi un plagio de Uptown Funk. Y que no me haya comprado entradas para el concierto de Madrid :-(
El Track Obsesión: La maravillosa VERSACE ON THE FLOOR, sin lugar a dudas.
No hay comentarios :
Publicar un comentario